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Oriol -100813-
Las fracciones numéricas, y las lineas de tiempo...
Cual es la importancia de nuestra verdadera conexión, con el conocimiento superior. Las civilizaciones anteriores a la nuestra, han estado cursando las epístolas a través del tiempo, directamente vinculadas a las fracciones numéricas. Estas se extienden, mas allá de lo que percibís como realidad. Las energías, que rodean nuestra periferia de tiempo, son extensiones mas allá de la percepción y el transcurso del tiempo tridimensional. La medición, ha sido representada a través de los números dándonos a entender, y así llegar a comprobar una métrica mas exacta. Los números en si, contienen múltiples energías, como múltiples son los estados de su manifestación, a través de la amplia graduación de nuestras consciencias. El año donde residimos, puede ser fraccionado de dos formas distintas, y las dos representan resultados satisfactorios, 2013 es igual a 20 - 13, cuando su manifestación vendría representada por la primera fracción, una constante estación de aprendizaje, donde todas las formas de vida, reconocerían su interior, (El despertar del Yo Superior en la tierra), mientras que el 13, nos identificaría con la partida o muerte, de muchas de las energías que nos rodean. En el Tarot, la carta numero 13 es la Muerte. (Mas simbolismo imposible). Los ceros a través de los números, nos representan una ampliación constante de aprendizaje, de las lecciones que venimos a trazar. La sigla total del año que estamos cursando, nos transmite una referencia a tener en cuenta, por los acontecimientos que fortalecerán nuestro aprendizaje.
Al igual que los horóscopos o los signos del zodiaco en su rueda de aprendizaje, estas fracciones se identifican con los procesos karmicos, a través de los cuales nuestras travesías, simbolizaran una liberación o tal vez un compromiso mayor. Supongamos que nacimos en el cuarto mes "Aries", y que nuestra Luna o Ascendente esta en "Acuario", cuando el orden a seguir empieza por Aries, y termina en Piscis. La rueda de tiempo, remarcara 01 de aries y 11 de acuario. Esta representación a nivel numérico, nos hablaría de un gran potencial sumido en el 01 de Aries, el cual durante toda la travesía de su aprendizaje, tiene que cursar los siguientes signos para completar su potencial. Esta representación es manifestada desde la intención, de una visión de tiempo sumida en la linealidad de los días, donde cursamos nuestro aprendizaje. Existen formas y combinaciones numéricas, para trascender el tiempo a través del cual vivimos nuestras experiencias. Las 5 fracciones numéricas, o números primeros identifican un propósito almico planetario, mientras que las 5 fracciones siguientes, indican una fuerte identificación con su exterior, a través del cual sera cursado el verdadero aprendizaje, a nivel personal.
Este reside a nuestro alrededor, y queda suspendido de forma notable a través nuestro, esperando a que des cifremos sus mensajes, como códigos de luz que acontecen ante nosotros. Toda representación numérica, nos abre un laberinto de posibilidades a reconocer, los acontecimientos que manifiestan el grado o percepción, fuera de las lineas de lo que hemos creído era nuestro tiempo. Como las citadas dimensiones, las lineas de tiempo se sumergen, en nuestros estados de manifestación personal. Dentro de estas lineas de tiempo, se manifiestan extensiones de una misma energía, que imprimen nuestras experiencias, a cumplir determinados acontecimientos, a nivel almico. Tal es el grado de manifestación de nuestras consciencias, tales serán las lineas de tiempo que vamos atravesar. A través de estas, siempre vamos acompañados por otros pasajeros que al igual que nosotros, cumplen con su proceso de integración planetaria. Las fracciones numéricas, nos transmiten esa informacion que trasciende nuestro aspecto mental de consciencia, y rehúsa la perfección a través de la luz, para de veras adentrarnos en quienes somos, y cuales son nuestros verdaderos propósitos. Las enseñanzas establecidas hasta el día de hoy, serán cuestionadas por esas mentes astutas, las cuales conocerán los verdaderos grados de una misma fracción, en esta expresión de tiempo.
Estas son invertidas, a través de las propias travesías que vivimos a titulo personal, las cuales nos impregnan al recibir de forma constante, la influencia de las energías que nos transmiten, y somos capaces de así miliar la variación que de forma notable, repercute la extensión desde los verdaderos grados de extensión, de nuestros grados de asimilación, los cuales se contemplan, a través de las verdaderas directrices que nos están emitiendo. Los espejo cristalino, que nos devuelve las energías para su integración, emite una frecuencia de tiempo, en la que nos sentimos sumergidos, debido a la densidad que constituye a nuestras mentes, dentro de ese proceso constante de aprendizaje. La dualidad, de nuestro espejo de tiempo, consiste en que nuestros pensamientos e emociones, choquen contra ese espejo de tiempo, y nos sean devueltas con mayor densidad. Esta es la experiencia, a través del conocimiento de nuestra percepción interna, la cual realza su mayor magnitud, dentro de una estación de conocimiento que impregna las variables, a través del mayor grado de luz y expresión, al constatar la efusión energética de los números, y su manifestación a través nuestro.
Los hilos se unen a través de las experiencias, mientras estas traen consigo, compromisos que tienen que ser cumplidos, para la completa integración de los registros de luz, que se manifiestan desde la intención y el aprendizaje de nuestras existencias. Todas las almas están unidas entre si, aun que nuestras mentes nos alejen de vivir la plenitud, de esta realidad sumergida a través del espejo de tiempo, el cual trasciende, dentro de la longitud de nuestro propio aprendizaje. Cada fracción numérica, trae consigo un principio al cual regir se extendiendo nuestras psiques, mas allá de lo que comprendemos como realidad. La realidad llega a trascender el tiempo, cuando contempla la impresión del verdadero reconocimiento. El vislumbrar mas allá de nuestra propia realidad personal, abriéndonos a vivir en conjunto realidades subyacentes a la nuestra, son ampliados y de que forma los velos, a través de los cuales las energías, no tienen unos ejes de manifestación, ni un principio ni fin. En muchos casos, podemos vivir en resonancia con esas fracciones , fuera de la longitud de ese espejo que nos devuelve las energías de forma directa, desde nuestro propio campo de visión. Trascendamos ese espejo de visión, y elevemos a óptimo nuestro estad de ser, en plena unidad y manifestación.
Vivimos una realidad sumergida constantemente, en fracciones numéricas que nos rodean, enviándonos mensajes de la posición o la extensión de nuestras posibles experiencias de aprendizaje. Las lineas de tiempo, o datos sobre la extensión de nuestros conocimientos, es basada en el conocimiento que empleamos a mantener una clara y directa, manifestación dentro de los acontecimientos, que se revelan en nuestras vidas. Los números de nuestra llegada a la tierra, contienen los datos a través de los cuales, la manifestación del conocimiento, revoluciona la textura desde donde extraer el contexto del ser. Todas las almas, viven inversas en esa expresión desde donde acontecen las estructuras, de nuestros propios conocimientos. Estos hilos están, constantemente en referencia, extendiendo nuestras experiencias, e haciéndonos participes de este hermoso y elegante juego, de posibilidades que acontece en nuestro propio conocimiento. Las variantes de tiempo, son como expresiones de energía que acontecen en nuestras vidas, creando abismos que nosotros mismos delimitamos, al ser representadas las influencias astrales, que acontecen a través de ellas. Las energías sumergidas, en la primera expresión del reconocimiento instauran la presencia del reflujo de la impresión mas elemental, de nuestras vidas. Estas acontecen, haciéndonos participes de experiencias que vamos a vivir acompañados, a través de la liberación de energías, para la integración constante de nuestro despertar.
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