ORIOL -050813- EL CONOCIMIENTO, NOS AMPLIA EL GRADO DE RESONANCIA...

                                                                                                     

                                                                    

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Oriol -050813-

Oriol

El conocimiento, nos amplia el grado de resonancia...

Vivimos inversos, en un constante deterioro de las energías de 3-D, sumidos en esos remolinos energéticos, creando de forma constante, que en muchos de los aspectos que vivimos, seamos nosotros mismos los que caigamos en las trampas, de nuestros propios egos humanos. Para dejar de caer en ellos, hemos de actuar directamente en un presente, y ser conscientes de las decisiones que tomamos. Cada uno de nosotros, somos individuales en su mayor expresión, aun que somos todo en su grado de manifestación. (El reconocimiento de nuestra consciencia fuera del tiempo, nos libera a ser quienes somos en realidad). La percepción del tiempo, ha creado un alejamiento del verdadero conocimiento, dando lugar a que construyamos desde una óptica de realidad, sumida en alfa y el omega. Las múltiples experiencias que hemos vivido, no han sido intensificadas como lo son las hebreas de nuestro adn. El conocimiento, nos amplia el grado de resonancia de nuestro ser, ayudándonos a adquirir un grado de percepción, extremadamente mas elevado, en su total manifestación. Estas se extienden mas allá, de nuestra óptica de realidad y resuenan a través de una fuerte magnificencia, con los registros holográficos personales. Dentro de la extensión de la consciencia, abrazamos la unicidad de nuestras existencias.

Dentro de nuestro tiempo, (el cual compartimos con otras formas de vida, en este planeta y a través del cual evolucionamos), asumimos consciencia de la longitud de las ondas, a través de las cuales navegamos en esa inmensa región del universo, del origen primero. Damos lugar en todo momento, de que nos hemos de percatar de la extensión de luz, que se manifiesta a través de el, una vez establecemos contacto con la región o zona planetaria, donde se rigen nuestras experiencias. El constante reflejo del espacio, a través nuestro se manifiesta como la intención del despertar almico, de nuestras extensiones planetarias. La influencia de dicha región, actúa como un catalizador en nuestras vidas, haciéndonos cumplir con todos esos aspectos que tenemos que transformar. Las hélices de cooperación se abren de par en par, para informar de la extensión de nuestras consciencias. La toma de consciencia se unifica a las regiones del planeta, donde son focalizados esos puntos de luz, ya que se abren paso a través nuestro, como los umbrales de energía que fluyen de la región de nuestro recorrido. Entrar en resonancia con las huéspedes del lugar, nos ayudaría a contemplar los posibles pasos a cumplir, en nuestro recorrido de evolución. El holograma planetario, influye y de que manera a través del recorrido de nuestros propios linajes en la tierra. La tierra, esta sellada con nuestra esencia, y esta tiene que ser vivida desde la formación, de nuestras existencias como humanos. 

Para comprender algo, (integrado directamente en nuestras hebreas de adn), tiene que ser de veras integrado en su mayor esplendor, (las formaciones rocosas del planta, resuenan con arquetipos sagrados, de nuestras identidades en la tierra), al hacernos relucir como los rayos del sol, desde la plena intención del mayor conocimiento. Los eslabones de nuestro aprendizaje nos hablan, de la extensión de los recursos que emprendemos, para adentrar todo nuestro conocimiento, en la manifestación del mas elevado atributo divino. Toda la forma es representada por la luz, en su mayor expresión, (como fue del primer instante) dando lugar a que cualquiera de las dimensiones de tiempo, sea elevada en su mayor extensión por las regiones planetarias, que constituyen la variante cuántica de la tierra. La experiencia, (manifestación de la energía como seres humanos), representa la integración del mayor don en la tierra, desde el mas alto nivel de aprendizaje, en completa intención de consciencia. La mente humana, se ciñe a conocimientos lineales de realidad, mientras que la extensión del conocimiento, impregna cada célula de nuestras vidas de luz y calor. De esta forma y a través de esta, que son construidos los lazos de nuestra evolución, (re-calibrando nuestras experiencias y haciéndonos trascender el tiempo dentro del espacio). La dualidad paraliza, las formaciones de centros de luz planetarios, que fortalecerían la expresión del mas alto grado de luz.

Por muy removido que este nuestro alrededor, tenemos que estar en plena conexión con nuestro Yo Superior, y es a través de el, que seremos capaces de manifestar esa paz y seguridad, que nos caracteriza. La presencia es la mayor extensión de los elementos, re-habilitados para nuestro aprendizaje. El interior del castillo, sigue iluminado en su mayor expresión, dando lugar a construir la expresión de lo mas elevado, desde el máximo confort y seguridad planetaria. En toda forma de vida, es manifestada la luz en su máximo grado de proyección. Satisfacer un deseo, dentro de nuestro prisma de realidad, solo es una mancanza del alma, (desde la extensión de nuestras mentes de tiempo), ya que deteriora nuestras expectativas, dentro de un verdadero cambio. Los cambios son manifestaciones de las regiones planetarias donde residimos, que entran en completa integración, con nuestros seres mas elevados. De la misma forma, que nuestras emociones como humanos, interactúan en la toma constante de consecuencias, desde el prisma de realidad que nos engloba en el presente de nuestro tiempo, la presencia de nuestro Yo Superior, nos habré las puertas a sentir con claridad, y a no emitir juicios a nuestro alrededor, desde la trascendencia de nuestros propios conocimientos. La fuerza es el mayor atributo humano, para el despertar d la tierra.

Las influencias planetarias, actúan a que sigamos condicionados por nuestras propias decisiones, (alternando los ciclos de tiempo, sumidos en la realidad tridimensional de consciencia en evolución), contribuyendo a seguir intercambiando de esta forma, nuestros posibles contratos en la luz. La geometría como herramienta de conocimiento, demarcó desde el principio de los tiempos, a través de la influencia constante de las regiones con sus correspondientes, aspectos solares planetarios. El mayor aspecto de la dualidad, nos hace creer que a través de nuestras emociones, somos capaces de reconocer esos caminos, que nos han sido labrados. La unidad de consciencia fuera del tiempo, nos abanica a seguir estableciendo contacto, con quienes somos de verdad. Nunca las respuestas a nuestras preguntas nos han sido regaladas, por el contrario, la constante impresión de realizar el bien desde la mayor expresión, nos ha llevado a ser quienes somos en realidad. Muchas mentes, creen haber encontrado sus caminos, sumidos en la aceptación y la integración de las experiencias que les han tocado vivir, cuando en realidad, todas ellas vienen representadas por los ciclos planetarios, que influyan en nuestras vidas. Recuerdo con mucho ímpetus, las palabras de mi mentor en la Tierra:

Por muy erguida que sea la subida hacia tu liberacion, nunca escojas las salidas sencillas. Con estas palabras, ya delimitaba en mi travesia por la tierra un cumulo de posibilidades, sumidas todas ellas en la lucha y el conocimiento, de la mejor impresion.